Vacunas
- Zolmayra Bustinza
- 18 feb 2017
- 2 Min. de lectura
Hace un par de días revisando la cartilla de vacunación de Idris me percaté de que le faltaba el refuerzo de dos vacunas importantes: Hepatitis A y Sarampión, Papera y Rubeola. Habíamos estado postergando estas vacunas por dos meses aproximadamente ya que Idris caía en contínuos cuadros de broncoespasmo y a recomendación de su pediatra no era bueno vacunarlo enfermo.
La mayoría de sus vacunas han sido aplicadas en una sola clínica (Clínica Javier Prado) y no me puedo quejar, las técnicas han sido muy atentas, pacientes y sobre todo han sabido explicarme a la perfección los futuros síntomas que podría provocar cada vacuna. Antes solía ir acompañada de mi mamá ya que yo sola no me daba abasto con dos niños pero ahora que no tiene tiempo disponible entré en un mega dilema. ¿Cómo voy a vacunarlo?
Lo primero que se me ocurrió fue dejar a Terek en el nido e irme con Idris a colocarle sus vacunas pero para mi mala suerte las veces que lo intenté no contaban con las vacunas que necesitábamos así que recurrí a la segunda opción salvadora, Facebook!
Buscando en distintas páginas de centros de vacunación llegué a #BiovacPerú quienes se dedican a la prevención y promoción de la salud a través de una vacunación segura tanto para niños, adultos, mujer y los viajeros. Entre todas las páginas que encontré esta me pareció la mejor ya que al inscribirte al #ClubBiovac (Click aquí para inscribirte) accedes automáticamente a descuentos en cada vacuna acercándote a sus sedes, aparte te dan la opción de Vacunas a Domicilio que definitivamente en un #HIT!

Soy mamá de dos niños así que salir con lo dos al lugar que fuera es simplemente un reto para mi, se me hace imposible poderlos mantener tranquilos fuera de casa porque son niños y están en toda la etapa de curosear, jugar y hacer berrinches así que opté por esa opción. Programé mi cita por inbox con #BiovacPerú y me agendaron para el Viernes entre 1 y 2 de la tarde. Un punto plus para ellos fue que llegaron super puntuales a la 1pm, segundo punto a su favor es que la licenciada que atendió a Idris fue muy dulce, paciente y me puso al tanto de los síntomas y malestares que podría tener mi bebé y para rematar llevó lo esencial para lograr ganarse la confianza de un niño un globo y un chupetín.
Idris no sintió ni los pinchazos porque estaba tan concentrado disfrutando el chupetín que no lloró ni nada (cosa que sí me había ocurrido antes).
Para las todas las mamás les dejo este super dato ya que a veces el tiempo nos gana, los hijos nos alborotan o sucede algún imprevisto que no nos permite salir de casa, esta es una buenísima opción. A mí me alivió un montón
Espero este dato les sea de utilidad. Gracias Biovac!!

Un beso.
Zolmayra
Comments